James Robert Flynn, escritor e investigador de la inteligencia humana reconoce que las “habilidades blandas” son un conjunto de cualidades personales como: comunicación, liderazgo, servicio al cliente, resolución de problemas y conflictos, trabajo en equipo entre otras, que permiten a los individuos tener éxito en el ámbito personal, el mercado laboral y promover su carrera.
Sin embargo, dentro del ámbito educativo van mucho más allá, son indispensables para un desarrollo integral. A raíz de la pandemia, los casos de dificultades socioemocionales se incrementaron, creando la necesidad de establecer estrategias que permitan a nuestros estudiantes gestionar sus emociones partiendo del autoconocimiento.
Entonces, ¿Por qué enseñar habilidades blandas?
El mundo actual, incluidos el lugar de trabajo y las instituciones educativas, se basa en las habilidades interpersonales que buscan crear vínculos entre lo que se hace y se siente.
Las habilidades blandas complementan las habilidades duras, es decir, el conocimiento, distinguen a los estudiantes en su camino y cuándo estos salen, aumentan las posibilidades de triunfar profesionalmente debido a su enfoque en resultados y capacidades de negociación.
Ayudan a mejorar las habilidades de escucha que conducen a la atención plena, la empatía y una mejor comprensión de la situación y las personas.
Cultivan el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, y les enseñan a cómo manejar situaciones estresantes de una mejor manera.
Favorecen la adaptación a un espacio de trabajo, de clase o ambiente, pero sobre todo los ayuda a crecer con la organización.
Se debe tener en consideración que las habilidades más observables en el ámbito laboral son el liderazgo, asertividad, proactividad, motivación, humildad entre otras siendo tan importante iniciar su desarrollo desde los niveles básicos.
Tenemos claro que ya no es suficiente poseer solo conocimientos, ahora se debe complementar lo cognitivo con lo emocional y es aquí donde entra el desarrollo de habilidades. El desarrollo de estas en nuestros estudiantes permitirá que se destaquen y se diferencien en todo ámbito, pero sobre todo que puedan afrontar nuevos retos con humildad, coherencia en sus actos y responsabilidad ante la toma de decisiones.
Por Johanna Guachichullca
Coordinadora Diploma.